A diez años de la medalla olímpica de Paola Espinosa y Tatiana Ortiz

Obtener una medalla olímpica es un momento que nunca se olvida y Paola Espinosa recuerda cada detalle de ese instante, cuando hace 10 años se colgó su primera presea al lado de Tatiana Ortiz en la plataforma sincronizada de los Juegos de Beijing 2008.

Paola tiene presente el momento en el que sabía que tenían el bronce en sus manos y, aunque cuatro años después volvió a subir al podio al colgarse la plata al lado de Alejandra Orozco en Londres 2012, el gozo de esa primera medalla quedó intacto.

A una década de distancia, Paola, quien brindó una entrevista a Grupo Imagen, tiene la mira puesta en competir en sus quintos Olímpicos en Tokio mientras Tatiana ya tiene algunos años lejos del deporte.

- A 10 años de distancia ¿cómo recuerda los Juegos?

Suena que fue hace muchísimo, pero lo recuerdo muy bien desde que llegué, pues fui la abanderada. Fue una experiencia muy bonita, ganar mi primera medalla después de tanto trabajo, además de que la presea me gustó mucho.

-¿Llegó con más presión siendo la abanderada?

Un poco, pero fue presión que me creé porque ya había ido a los Olímpicos en Atenas (2004). Desde que regresé dije: quiero llegar a otros juegos, pero ya no quiero ir nada más a ver, quiero ganar una medalla.

-En 2004 no tuvo entrenador en la competencia y en Beijing 2008 fue una circunstancia completamente opuesta.

A pesar del nervio y de la emoción, ya los pude disfrutar, porque ya sabía que tenía un equipo de trabajo que me cobijaba y que no estaba sola.

-¿Cómo recuerda la final?

Creo que ni Tatiana ni yo pensábamos que podíamos ganar medalla, las expectativas las tenía en la prueba individual. Antes de la competencia mi entrenadora nos dio un beso y nos abrazó, eso nos llenó de energía. En los primeros clavados, que eran obligatorios, no nos fue bien, pues no éramos muy técnicas, pero en los libres teníamos una lista muy competitiva. Hacíamos un clavado que nadie se atrevía, las tres y media vueltas hacia atrás, y lo hicimos muy bien.

-¿Había nerviosismo por estar últimas en esos dos primeros clavados?

No, porque en ese entonces no veía de lejos y no alcanzaba a ver el tablero. En realidad si lo hubiera visto no me hubiera sorprendido porque sabía que esa iba a ser la estrategia.

- ¿Te sorprendió el recibimiento en México?

No sabía el impacto que podía dar una medalla a México. Yo veía los Juegos Olímpicos de pequeña cuando ganaban y todo, pero nunca me imaginé lo que llevaba consigo el ganar una medalla olímpica.

-Ahora sólo te falta el oro.

Ojalá se pueda dar. Volteo y digo, qué bonita vida y qué bonito camino construí y estoy muy feliz. Ahora deportivamente hablando he cumplido todo lo que he querido, mis objetivos, donde me he parado he ganado medalla.

-¿Cuándo será el momento de retirarte?

Voy paso a paso, pero sí tengo claro que estos Juegos Olímpicos tienen que ser especiales, para llevarme un recuerdo si en su momento decido que son los últimos.

Fuente: El Excelsior (portal electrónico)/Foto: Mexsport